Casi una década de experiencia trabajando en suelo agrícola chileno y más de 40 años de desarrollo biotecnológico han permitido solucionar importantes obstáculos producidos por el uso constante de productos químicos y degradación del suelo.
“Hace 10 años no se hablaba en Chile acerca de la importancia de los microorganismos. No se profundizaba en la formación de los profesionales agrícolas y tampoco se tomaba en cuenta su participación en el equilibrio del ecosistema”, afirma Ana Luengas, directora técnica de Biopunto Chile.
Esta situación fue una de las principales barreras para que los agricultores y productores comenzaran a confiar en la efectividad de los Microorganismos Eficaces, una biotecnología desarrollada en japón en 1980 por el por el Dr. Teruo Higa.
La Tecnología EM™ está compuesta por microorganismos aeróbicos y anaeróbicos benéficos y altamente eficaces. Algunos de ellos son probióticos, no están modificados ni sintetizados, están presentes en la naturaleza y son ampliamente utilizados en alimentación humana. Juntos, aceleran la degradación de la materia orgánica mediante un proceso de fermentación antioxidante, evitando malos olores y contribuyendo a la regeneración, equilibrio y bienestar de los ecosistemas.
PROBLEMAS EN LOS CULTIVOS
Esta biotecnología fue diseñada para saneamiento ambiental, purificación de aguas, producción agrícola y animal sustentable, logrando productos de alta calidad a bajo costo.
Por eso, el 2012 tras analizar las experiencias en países de América que hace años la utilizaban en sus cultivos, Ana Luengas solicitó la representación del uso de La Tecnología EM™ en Chile a través de Biopunto, para así replicar los casos de éxito internacional en el manejo de los problemas producidos tanto por la agricultura convencional como por los sistemas de producción animal y la contaminación ambiental.
1.- Pérdida del equilibrio microbiológico
Uno de los principales problemas estudiados por el equipo de técnicos y agrónomos de Biopunto, fue la aparición de enfermedades como fusarium, phytophthora, cancros bacterianos, oídio, botrytis, entre otras.
A nivel de suelo y follaje, el desarrollo de plagas como nemátodos, además de dificultades en la absorción de nutrientes y crecimiento de las plantas.
“Lo más importante de entender es que el suelo es un ecosistema vivo, por lo que cuando lo intervenimos su equilibrio depende del manejo que hacemos de esa intervención. Durante mucho tiempo no se dimensionó el efecto que tendría la utilización excesiva de productos químicos tanto para fertilizar como para control de plagas y enfermedades. Estos productos están hechos a base de sales por lo que contaminan y degradan el suelo”, indica Ana.
Además, la directora técnica de Biopunto, explica que como consecuencia de lo anterior se muere parte de la vida del suelo, generando ambientes oxidativos e insalubres propicios para el desarrollo de patógenos, los que a su vez se hacen resistentes a los productos de control, entrando en un círculo demandante, nocivo y costoso.
“A través de microorganismos eficaces acompañados de otras buenas prácticas, podemos restaurar la vida, fomentando el desarrollo de suelos supresores de enfermedades con alta disponibilidad de nutrientes que serán absorbidos por las plantas.
“Tenemos casos en que durante 2 años desde la aplicación de Tecnología EM™ no han tenido que fertilizado, ya que al hacer los análisis de suelo, se encontró que habían suficientes nutrientes”, explica la directora técnica de Biopunto.
–> Encuentra más información para proteger la salud de tus cultivos.
2.- Suelo compactado
Otro problema derivado de la falta de vida en el suelo es la perdida de estructura, compactándose y dificultando la absorción de agua y también el crecimiento de raíces. Esto se traduce en mayor inversión, se necesita maquinaria y mano de obra para arar, y esto tampoco es una buena práctica para mantener la vida del suelo.
“Cuando tenemos vida en el suelo estos microorganismos y sus sustancias bioactivas hacen que se formen agregados, lo que aumenta la porosidad y por tanto la capacidad de absorción de agua, con eso podemos optimizar este escaso recurso”, explica Ana Luengas.
Experiencias y testimonios:
PROCEDIMIENTO Y RESCATE PERSONALIZADO DE CULTIVOS
Una vez que son contactados por los agricultores, el equipo de Biopunto se traslada a terreno para realizar un análisis exhaustivo de las condiciones del cultivo y preparar un protocolo personalizado que permita mejorar la calidad del suelo y del cultivo.
- Visita a terreno: “Estudiamos las características del cultivo, el estado del suelo, % de materia orgánica y qué problemas y expectativas tienen.
Aunque se han desarrollado fichas técnicas con aplicaciones y usos generales, éstas se complementan con un análisis previo, “nos interesa entregar una atención personalizada, además también los acompañamos con las inquietudes que se van presentando en el tiempo”, aclara Ana.
2. Creación de protocolo de aplicación: “Les indicamos cómo y en qué cantidades deben aplicar los productos, adaptándonos a la rutina que se tiene para ocasionar el menos trabajo adicional posible. Los productos vienen concentrados y deben ser activados para su aplicación, en este sencillo proceso también prestamos toda la asesoría necesaria.
–> Revisa la experiencia de los agricultores que mejoraron su cultivo de tomates.
Para agricultura, Ana Luengas, recomienda dos productos: EM1 que va directamente a suelo y follaje y el EM5, solo para follaje, “es más potente y concentrado por lo que lo ocupamos para iniciar o para casos con afecciones muy graves”, precisa.
–> Encuentra más información sobre los productos y sus fichas técnicas, aquí.
3. Activación: El EM™️ es una tecnología que funciona en la materia orgánica, por eso es efectivo en agua, suelo, compostaje, guanos y hasta en el mesón de la cocina.
Actúa de dos formas:
– Promoviendo un sistema fermentativo de degradación de materia orgánica, a través del cual se producen sustancias bioactivas que promueven ambientes saludables y nutritivos.
– Activando un balance microbiológico benéfico para ejercer competencia y no dar espacio ni alimento a patógenos.
–> Profundiza en la activación del producto, aquí.
4. Aplicación: “En Chile generalmente es muy fácil porque se usa mucho el riego por goteo, entonces se pone en los estanques donde se aplican fertilizantes y otros productos en las casetas de bombeo. También se pueden aplicar con bombas de espalda, nebulizaciones en instalaciones animales y hasta con drones para follaje, todo depende del caso. Son compatibles con todo tipo de productos, incluso hasta con pesticidas. Con lo único que no los son es con bactericidas, fungicidas y cloro”.
En horticultura los resultados se ven rápido, sobre todo en plantaciones de tomates “un cultivo muy importante porque es parte de la canasta familiar y en Chile es uno de los cultivos más costosos, tanto que no se produce lo suficiente para satisfacer la demanda local, hay que importar. Por eso, la acción de la Tecnología EM™ es importante ya que permite bajar costos en un 70% en productos de control, incentivando su cultivo. También trabajamos exitosamente en arándanos, nogales, viñas, entre otros, lo más importante en cualquier cultivo es la calidad del suelo” indica Ana Luengas, directora técnica de Biopunto y agrega: “Al tener un suelo vivo, el costo se minimiza, puedes poner desde un 20% y hasta un 40% menos de fertilización, 80% menos de productos de control de patógenos, menos mano de obra en aplicación de productos y hacer un cultivo más rentable.”