Compostaje y abonos orgánicos
El compostaje es un proceso mediante el cual los desechos sólidos orgánicos son transformados en abonos orgánicos por acción de microorganismos en presencia de oxígeno.
El objetivo de inocular los residuos con EM•Compost® está orientado a acelerar el proceso de descomposición del material, controlar la generación de olores y lixiviados y mejorar la calidad microbiológica y nutricional del material final, al incrementar la solubilización de nutrientes y generación de sustancias benéficas, produciendo un compost libre de patógenos y de calidad.
Proceso del compostaje de residuos orgánicos con EM™:
Aspectos Importantes:
El sitio para el compostaje debe ser techado para controlar la humedad, y el piso duro y nivelado que permita el manejo adecuado de los lixiviados (líquidos) que se puedan producir durante el proceso.
El material a compostar es de origen vegetal (verde y seco) y animal y debe ser preferiblemente fresco (entre más fresco, mayor es la calidad nutricional), consta de:
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- Residuos domiciliarios como frutas, vegetales, carnes crudas o cocidas, residuos de te o cafe sin el papel filtro, ceniza, entre otros (ojalá tratados con Bokashi-EM™).
- Residuos de origen animal (bovino, caprino, avícola, mascotas, etc)
- Residuos de origen vegetal derivados de cosecha o post-cosecha, podas de jardín, etc.
- Procesamiento de alimentos.
- Mataderos y agroindustrias entre otros.
El tamaño de las partículas debe ser entre 3 y 6 cms. para facilitar el intercambio del aire del interior al exterior y el contacto del material con los microorganismos.
Las dimensiones de la pila influyen básicamente en la aireación y temperatura de la pila para la transformación adecuada del material orgánico. El objetivo de la aireación durante el proceso de compostaje es suministrar oxígeno para la degradación microbiana, controlar la temperatura y eliminar la humedad de la materia orgánica.
Se recomienda un ancho entre 0.8 a 1.50 mt., una altura de 1.00 a 1,20 mt. y el largo dependerá de la disponibilidad del terreno, la altura puede variar según el clima de la zona, en climas cálidos se trabaja menor altura para que la pila no caliente en exceso y en climas fríos pilas más altas para mantener la temperatura.
La temperatura de la pila debe estar en un nivel intermedio entre 45° a 60° grados Centígrados. Temperaturas superiores a los 60ºC ocasionan la pérdida del Nitrógeno por volatilización y obtendremos un Compost– EM™ pobre en este nutriente.
La humedad óptima es de 40% o cuando al presionar el material con la mano, no escurre agua entre los dedos. El agua es requerida por los microorganismos para desarrollar sus funciones metabólicas y es utilizada como vehículo de trasporte de nutrientes y productos de desecho. Cuando hay exceso de
humedad puede haber putrefacción y malos olores, es muy recomendable utilizar aserrín o similar, el cual sirve como absorbente y mejora la relación Carbono/Nitrógeno, esencial para el control de amoniacos. Cuando hay poca humedad el proceso de compostaje se detiene.
La relación Carbono/Nitrógeno óptima para el inicio del compostaje debe estar comprendida entre 25-35/1, esta relación va bajando hasta llegar a valores cercanos a 10-15/1 y es cuando el material está listo para ser usado.
Los materiales con relativo alto contenido en Carbono deben mezclarse con materiales con relativo alto contenido en Nitrógeno y viceversa.
1.- En la base de la pila se coloca una capa de aserrín, cascara de arroz o similar de 5 cms. de espesor aprox. inoculada con abundante EM•Compost®-Activado, con el objetivo de recoger los lixiviados producidos en la transformación de la materia orgánica.
2.- Se van agregando las capas con los residuos de origen vegetal y animal. En la medida que se van agregando las capas se debe inocular con EM•Compost®-Activado, para que queden en su totalidad en contacto con los microorganismos, en dosis de 2 litros de EM•Compost® activado por 18 litros de agua sin Cloro (menos agua de lo normal). En caso de tratar residuos sólidos de industrias o de plantas de tratamiento de basuras, se debe mezclar con estiércol de bovino, caprino, avícola o suino mientras no sobrepase el 40% del total de la mezcla.
3.- Si es posible cubra la pila con una lona plástica.
4.- Después de cuatro días aprox. la pila se empieza a calentar y se deben realizar volteos evitando que la temperatura sobrepase los 60°, adicionalmente se deben realizar volteos semanales durante el tiempo que dura el proceso. Semana por medio a la vez que hace hace el volteo se inocula nuevamente con EM•Compost®- Activado, en dosis de 1 a 2 litros de EM•Compost®-Activado diluido en 19 litros de agua (sin Cloro).
5.- Finalmente cuando la temperatura de la pila de compost empieza a bajar y el material tiene un color marrón oscuro, esponjoso, un olor agradable a tierra y la humedad no supere el 20% ( si se desea comercializar), el abono Compost–EM™ esta listo para ser cosechado, entre 6 y 8 semanas.
6.- El abono orgánico Compost–EM™ se puede usar inmediatamente en los cultivos en dosis de 1kg / m², ó se puede almacenar en sacos en un lugar sombreado. También se puede dejar madurando en el área de compostaje manteniendo una humedad del 14% para mantener la población microbiana benéfica. Aplicando el compost al campo a las 8 semanas es más fertilizante, a más tiempo de maduración es más enmienda.